A lo largo de una prolífica carrera (14 films hasta la fecha, contando la reciente participación en Cannes), el realizador Kim Ki-duk mantuvo en su obras aspectos claramente autorales, pero al mismo tiempo sus films alcanzaron una mirada hacia lo masivo, sustentada en historias que podían traspasar las barreras culturales e ingresar en la esfera de lo más esencial del ser humano. "Primavera, verano, otoño, invierno... y otra vez primavera" reflexionaba sobre la redención a través de algo tan distante de nosotros (los occidentales) como lo es la relación entre un monje y su aprendiz. Las imágenes subyugantes podían atraer a un público más numeroso, y en efecto lo hicieron. Luego se estrenaron "Hierro 3" y "El arco", donde volvían a aparecer sus temas predilectos: la comunicación, lo social y lo primitivo, la necesidad de ser en sí mismo y perdurar en los demás.
"El tiempo" vuelve sobre los mismos temas, pero esta vez la palabra adquiere nuevos significados. Si en "Hierro 3" los amantes no necesitaban hablar para expresar lo que sentían, en su nueva película los personajes hablan, y hablan, pero no se comunican. Y es allí donde la trama deviene trágica.
Seh-hee y Ji-woo forman una joven y bella pareja "cool" de Corea del Sur que muestra signos de agotamiento. Ella constantemente manifiesta celos, y él se siente abrumado por esta situación. Un día Se-hee le propone que mientras hacen el amor (dado que no logra excitarse) piense en otra chica. Recién entonces pueden completar el acto amoroso. Desde ese momento, ella potencia su angustia y decide someterse a una cirujía estética para cambiar de rostro y volver a enamorarlo nuevamente. Súbitamente desaparece de la vida de su pareja, para que sus heridas cicatricen durante seis meses.
Pero nadie retorna de la misma manera, ¿o sí? De allí en más, la trama se volverá desmesurada, reiterativa, de a ratos naiff, como el mismo amor que surge de los personajes. Ella esconde su verdadera identidad, y las contradiciones se ponen a flor de piel. El no puede despegarse de la imagen de su novia tal cual era, y las pulsiones eróticas sólo producirán más daño. Kim le imprime al relato varios tonos, que van desde el drama intimista, el suspenso, y, más hacia el final, algo de horror "cronemberiano".
"El tiempo" es quizás demasiado reiterativa en relación a los estados de los personajes. Pero dado que ellos mismos son reiterativos (la visita al quirófano se irá duplicando), ese aspecto termina siendo una virtud. Cada uno de los temas que el film aborda (a los que se suman la superficialidad, la necesidad de mantenerse joven cueste lo que cueste, la obsesión) son variaciones sobre el mismo amor de la pareja: absurdo, desmedido, errático. El cierre, perfecto, dejará más preguntas que respuestas, lo cual convierte a "El tiempo" en una película más interesante.
Ezequiel Obregón
El tiempo ( Shi gan-Time , Corea del Sur-Japón/2006).
Dirección: Kim Ki-duk.
Intérpretes: Ha Jung-woo, Park Ji-yun, Sung Hyun-ah, Kim Sung-min, Kim Ji-yun, Kim Bo-nah.
Guión: Kim Ki-duk.
Fotografía: Sung Jong-moo.
Música: Noh Hyung-woo.
Edición: Kim Ki-duk.
98 minutos.
Dirección: Kim Ki-duk.
Intérpretes: Ha Jung-woo, Park Ji-yun, Sung Hyun-ah, Kim Sung-min, Kim Ji-yun, Kim Bo-nah.
Guión: Kim Ki-duk.
Fotografía: Sung Jong-moo.
Música: Noh Hyung-woo.
Edición: Kim Ki-duk.
98 minutos.